Firenze

Florencia es una ciudad que te deja con la boca abierta, parece imposible concentrar tanto arte y tantas maravillas en una ciudad relativamente pequeña. Era mi segunda vez allí pero debo reconocer que me impresionó más que la primera, pasear por sus calles y ver como caía el sol desde el Ponte Vecchio fue precioso. Quizás las fotos son algo oscuras, pero ya era tarde cuando llegamos y sinceramente no he querido retocarlas para no hacerlas irreales, me gustan los tonos oscuros de los edicios cuando ya se va haciendo de noche. Por cierto, no os fijéis demasiado en mis piernas, pero después de los 33 mosquitos que me picaron en Milán las piernas se me hincharon por completo y lo pasé un poco mal. Este vestido me llegó justo a tiempo para las vacaciones y fue perfecto, me encanta su estampado y el tejido es súper fresquito, lo que vino muy bien para los más de 35º que teníamos durante el día. 

Queríamos entrar en el Duomo y a ver el David de Miguel Ángel pero las colas era kilométricas, así que si me dejáis aconsejaros, comprad las entradas por adelantado porque merece totalmente la pena la visita.

Firenze is an amazing city, it could be impossible how it can be even so beautiful and full of stunning buildings, this was my second time in the city but it was more impressive than the first time (I'm 14 years older, maybe it's related). The sunset from the Ponte Vecchio was a magical moment. Maybe the pictures are a little bit dark, I tried to retouch them but then I realised I like them as we took them. The dress arrived just in time for the holidays, I love the print and the fabrics, perfect for the hot days we had.

Sombrero/Hat: puesto callejero/flea market

Vestido/Dress: SheIn

Sandalias/Sandals: mercadillo/flea market

Bolso/Bag: Lefties (s/s 18)